Abstract
La capacidad de reflexionar acerca de nosotros mismos y de nuestros actos, así como la
posibilidad de planear una serie de actividades para conseguir determinado objetivo, han
tenido grandes implicancias para nuestra supervivencia. La relevancia de estas habilidades
cognitivas nos ha llevado a la indagación de dos cuestiones. Por un lado, él momento
ontogenético en que desarrollamos estas habilidades y por otro, si somos las únicas criaturas
vivientes que disponemos de las mismas.