Abstract
Las simulaciones computacionales ocupan un lugar especial dentro de las prácticas científicas contemporáneas. Ellas aparecen en contextos tan diversos como en las investigaciones sobre inteligencia artificial o en tecnologías sofisticadas de la más variada índole. Resulta difícil establecer criterios de ponderación epistemológica de estas prácticas sin un adecuado marco clasificatorio para las mismas. Esta tarea ha sido realizada parcialmente desde numerosos puntos de vista, pero, en nuestra opinión, la mayoría de los enfoques estudiados adolecen de cierto regionalismo que no deja ver claramente matices generales de considerable protagonismo metodológico y conceptual.