Abstract
En 1943 dos prominentes científicos, Max Delbrück y Salvador Luria (1943), llevaron a cabo un experimento con el cual intentaron explicar el mecanismo por el cual ciertos organismos, concretamente la bacteria Escherichia coli, adquieren la capacidad de inmunidad al ataque de otros, en este caso un virus al que se denomina comúnmente bacteriófago por la capacidad que posee de devorar bacterias.
El problema principal, en ese entonces, era dirimir entre dos principios alternativos pertenecientes a dos teorías rivales -lamarckismo y danvinismo- ya que ocupándose ambas de los mecanismos evolutivos de los vivientes, debían ser capaces de subsumir bajo sus principios explicativos el fenómeno en cuestión y dar cuenta del mismo.