Abstract
Los conceptos de habitus y de conciencia práctica, de Bourdieu y Giddens respectivamente, están inscriptos en el cuerpo como modos de saber-hacer no mediados por representaciones.1 Este enfoque de la comprensión práctica enraizada en un nivel no representacional, no sólo limita el rol que las representaciones juegan en la determinación de la acción; sino que sitúa los significados en el centro de las teorías sociales. El presente trabajo intenta mostrar el rendimiento y las limitaciones de la teoría de la práctica de Charles Taylor. Para ello, analizaré su concepción de las prácticas constituidas por descripciones constitutivas, luego presentaré el alcance del "significado experiencial" y por último discutiré algunos problemas epistemológicos que se presentan para la constitución de teorías sociales de este último tipo.