Abstract
La ganadería Argentina está atravesando un profundo
proceso de cambio, el cual se debe en parte, a una
reducción de la superficie destinada a dicha actividad. Los sistemas ganaderos pastoriles exportan una menor
cantidad de nutrientes que otras actividades
agropecuarias, debido al retorno que se produce a
través de las deyecciones y la remoción incompleta del
material vegetal. Sin embargo las actividades
ganaderas pueden alcanzar un alto grado de
intensificación y el consumo de nutrientes puede ser
mayor o igual al que alcanzan los cultivos agrícolas
(Berardo et al., 2006). El objetivo es evaluar el efecto combinado del uso de fertilizantes y
remoción del suelo, sobre la producción de forraje de
las pasturas subtropicales y analizar el posible
incremento de la carga animal.