Pasiones y archivos en la universidad
Abstract
La Universidad Nacional de Córdoba acaba de cumplir cuatro siglos. Se trata de una institución con una larga tradición de archivos fundada por jesuitas que en el siglo XVIII fueron expulsados y despojados de una serie de bienes de los que nunca fueron dueños legítimos y de algunos otros que sí les pertenecían: por ejemplo, su biblioteca, un verdadero archivo del saber de toda una época. Esos formidables fondos plurilingües son parte del patrimonio de la referida Universidad; y ello a pesar de que por años vivieron en la zozobra y el destierro: alguien decidió que el mejor lugar para esa enorme librería jesuita era Buenos Aires. A comienzos de este siglo, ese fondo fue redomiciliado: volvió a Córdoba. También atravesó momentos inciertos la biblioteca y el archivo personal de Gregorio Bermann. El derrotero individual de Bermann abarca distintas zonas de la cultura local como nacional e internacional. Como médico recién recibido, y estudiante de filosofía, llegó a Córdoba en 1918 y se convirtió, junto a Deodoro Roca y Arturo Orgaz, en una figura clave de la Reforma de 1918 y en un animador de la vida política y cultural de la ciudad. Su trayectoria intelectual da cuenta del agitado siglo XX, al punto de que su biografía conecta distintos momentos de la vida política y cultural de la ciudad universitaria, del país, y de la historia de la psiquiatría y psicoanálisis en Latinoamérica.