Abstract
En el presente trabajo intentaremos mostrar, a partir de un contraejemplo para la
irreversibilidad mencionada, que la asimetría que Lewis supone hay en el mundo efectivo o
bien no explica la irreversibilidad contrafáctica, o bien no existe.
Intentaremos mostrar además que una parte de su análisis, la que corresponde a las
reglas pragmáticas para el ordenamiento de mundos, no puede sostenerse si el mundo
efectivo es simétrico.