Abstract
En este trabajo me gustaría mostrar que la doctrina de la materia de la proposición, una doctrina atribuida a Aristóteles por los primeros comentaristas de su lógica, soluciona en gran parte estas dificultades enumeradas. Dicho de otra manera, el olvido de esta doctrina en la explicación de la lógica de Aristóteles es responsable de los malentendidos mencionados aquí. Para hacerlo así, explicaré primero en qué consiste esta doctrina y luego mostraré cómo esta doctrina se integra a la lógica de Aristóteles, resolviendo cada uno de los malentendidos mencionados.