Activismos culturales, (inter)subjetividad y estética. Notas en torno a una contrabiopolítica emergente

Abstract

Ante el avance de las fronteras de las así denominadas "industrias extractivas" –gas, petróleo y minería-, y en especial, respecto de la mega-minería predominantemente transnacional en Argentina-, las resistencias georreferenciadas y ampliadas (no territoriales), protagonizan un incesante proceso de invenciones sociales, réplicas sitiadas y/o situadas, ante la fenomenología y la colonización semiodiscursiva legitimadora del modelo, y la violencia sobre los cuerpos. La sobreexplotación de la naturaleza tiene, entre sus registros, el vivir en la corteza la muerte difusa (Antonelli 2009, 2010 y 2012). Con la primera categoría remito a la dimensión biopolítica que atraviesa la condición de existencia de pobladores, vecinos, etc.; con la segunda, refiero a las percepciones, evaluaciones y sentires, por la desapropiación violenta de la indisponibilidad, núcleo duro de la tanatopolítica, tanto geoterritorial, cuanto socioambiental y patrimonial. En este asimétrico escenario, subjetividad, sensibilidad y estética se enlazan en invenciones sociales semio-políticas de intervención, así como en la reapropiación y migración de activismos culturales. Tales activismos de subversión sígnica o "guerrilla semiótica" de las resistencias, intervienen e interceptan los sistemas dominantes, en algunos casos con la articulación de terceros actores, como colectivos de arte, esto es, mediante el activismo colaborativo. En esta ponencia conceptualizo ese "patrimonio de bienes comunes culturales", en tanto y analizo fenómenos de ethos, estesis y pathos, y marcos o de los activismos emergentes.